Vamos hacia el 45/19 avanzando en estos tiempos que son de Paz y Unidad
La Compañera Vicepresidenta Rosario Murillo, en su comunicación de mediodía, expresó que Nicaragua se encuentra contenta y agradecida con Dios por todos los triunfos, y porque nos da la fuerza para luchar, trabajar y vencer, avanzando en tiempos de Paz y Unidad.
«Contentos y agradecidos al Dios de todos los triunfos porque estamos caminando, porque somos luchadores, nos da la fuerza de alma de espíritu de corazón, para luchar, para trabajar, para vencer, en toda circunstancia, siempre que seamos amantes de la paz, y que estemos llenos de buenos sentimientos, de cariño, de respeto y seamos capaces de creer y crear el bien de todos», dijo.
-
Lee más aquí: Delegaciones celebrarán el 45/19 con mucha solidaridad y admiración a la Revolución Sandinista
Agregó que «y bueno, caminando, caminando hacia el 45/19, cuántos años, cuántas luchas, cuántas esperanzas, cuánta devoción y entrega, diríamos, cuánto sacrificio, aunque sabemos que entregar la vida por la patria es un acto heroico y sublime que lo vemos, lo sentimos como un sacrificio, pero más que un sacrificio es una piedra fundacional».
«Es lo que hace que en cada rincón de una patria como la nuestra, haya templos, templos de coraje, templos de dignidad, santuario y sagrario, de coraje, de dignidad, de heroísmo, de resistencia, de lucha, de triunfos, de tantas victorias», mencionó.
«Qué bendición la de haber nacido aquí en esta patria, que está llena de amor, porque todo lo que se ha hecho y se hace, toda esa entrega, toda esa devoción, todo ese cariño que nos hace dar la vida por la patria, todo eso es bendición de Dios, y es privilegio y es orgullo nacional», apuntó.
Resaltó que «y aquí estamos, avanzando con ese mismo espíritu, sabiendo que estos tiempos que son de paz, nos debemos a todos los que nos han dejado, el deber, la responsabilidad de consolidarla y defenderla, como lo único que permite el progreso, el avance de las familias nicaragüenses, hemos soñado, queremos y merecemos».
«Estamos ya a martes 9 de julio recibiendo todas las confirmaciones, muchas, centenares de hermanos que nos visitarán, líderes estudiantiles, líderes juveniles, líderes sociales, muchos comunicadores, muchos artistas, muchos hermanos, todos ellos solidarios, solidarios y admiradores de la fuerza de espíritu de nuestros ancestros que son, además, nuestros guías, espíritus guías, tenemos ese orgullo, ese honor de defender, de heroicos pueblos originarios, dignos pueblos originarios«, siguió.
Detalló que estos dignos pueblos originarios son «inteligentes, brillantes pueblos originarios, cultura formidable que quisieron aplastar y no pudieron, porque somos herederos de esas culturas formidables que a lo largo del tiempo, por supuesto, se van transformando y se van uniendo a otras culturas formidables, estamos hechos, entonces, de cultura, de luz, de vida, de verdades verdaderas, de tanto cariño».
«Orgullosos siempre de esa heredad, nuestros pueblos originarios, nuestros generales invictos, nuestra heroica resistencia, heroica y victoriosa resistencia, en todos los momentos en que han querido aniquilarnos los imperios voraces, conquistarnos, doblegarnos, aniquilarnos, pero no han podido, ni podrán, en todo tiempo han tratado de matar el alma nicaragüense», argumentó.
Puntualizó que «y aquí estamos cada vez más consciente de ser ese pueblo grande, orgulloso de gran espíritu, de gran corazón, de gran alma, de gran coraje y de tantas luchas, y victorias, ni pudieron ni podrán, eso lo podemos decir categóricamente, porque venimos, venimos de tanto, y somos tantos y vamos hacia tanto».
«¿Qué quiere decir? Progreso, prosperidad, salir de esa miseria que nos impusieron, que nos quiere seguir imponiendo, porque ahí están los malos, los píos, los delincuentes los forajidos de siempre, ahí están, siempre hablando mal, siempre perdidos, porque lucen perdidos, siempre perdedores, además, porque son perdedores, siempre fracasados, además, porque han fracasado en el intento de doblegar a este pueblo grande, que ni se vende, ni se rinde jamás, somos el pueblo magnífico, formidable grande de Darío», añadió.
Argumentó que «imaginémonos lo que significa Darío para el mundo, el pueblo grande de Rubén Darío, el pueblo grande, el pueblo grande de Augusto Nicolás Calderón Sandino, el pueblo grande de Benjamín Zeledón, el pueblo de Andrés Castro, del General Estrada, el General Estrada, José Dolores, y el Estado Mayor del Ejército Defensor de la Soberanía Nacional, nuestro Sandino, nuestro General Estrada, esos Generales Inmensos, Pedro Altamirano, Miguel Ángel Ortez, Umanzor, todos ellos en el firmamento de los héroes que dan patria, y sentido de patria».
«El que no se sienta orgulloso de lo que hemos hecho a lo largo de nuestra historia, de cómo hemos resistido para vencer aquí en la patria, pues hoy unos apátridas, que no tiene patria, son lacayos, serviles, esclavos de mente, de conciencia, son hijos de casa, ese término se usaba antes para distinguir entre los hijos biológicos, empleados que tenían en la casa, ni siquiera podemos llamarle empleados, sirvientes así les decían, hijos de casa, recogían gente humilde para que les sirvieran», comentó.
«En este caso no son humildes, algunos tal vez, medio enredados en egoísmo y voracidades, queriendo copiar el patrón de los patrones, sin darse cuenta que nada les hacía parecerse, y esos serviles, esclavos, lacayos, servidumbre de los imperios, esos no tienen patria, obviamente, no tiene patria, por eso odian a su patria», agregó.
«Qué terrible, por eso odian la tierra de donde vienen, qué terrible, de donde llegan, de donde vienen, qué terrible imagínense blasfemar, de uno mismo, de su sangre, de su nervio, de su raíz, blasfemo, apátrida, ahí están siempre deseando el mal; y bueno lo decimos todos los días, al que desee el mal atrae el mal, esa es una ley de la vida, es natural, si yo me lleno de maldad, lo que atraigo es maldad, no puedo atraer otra cosa, porque no soy otra cosa o no son otra cosa», enfatizó.
A esto añadió que «los que llenos de mal, desean el mal, son mal y mal que las personas maldicen, mal del que las personas se apartan, mal del que las personas reniegan, porque la verdad que la maldad, la mezquindad es miseria humana, uno se aparta, reniega y dice, no, yo no quiero ser parte de esa miseria humana; tenemos el deber y el derecho de trascender los seres humanos».
«Y bueno, sin embargo, los que amamos a Nicaragua de verdad y somos heredad de tantos nicaragüenses grandes, sabemos cómo ir adelante que es en unidad, sabemos cómo trabajar juntos, todos juntos, y sabemos cómo vivir seguros, tranquilos, luchando, trabajando, prosperando, ¿y cómo?, desde la paz, ¿y cómo?, defendiendo la paz, ¿y cómo?, generando más concordia todos los días desde el respeto, la hermandad, el amor cristiano, socialista y solidario», sostuvo.
«Así no nos llega el mal, el mal está gracias a Dios desterrado desde esta patria bendita y siempre libre, desterrado en todas sus modalidades, incluso aquellos que se disfrazaban de religiosos, porque un religioso no puede ser malvado, aquí hemos conocido verdaderos malvados disfrazados de religiosos, pero a nadie engañan».
«Así lo decía Sandino, con el tiempo no se puede engañar a nadie, y es la verdad, y por eso nos sentimos hoy, todavía más plenos en este 45/19, porque sabemos que hemos caminado tanto, que hemos enfrentado tanto, que hemos luchado tanto que merecemos lo mejor, en primer lugar la paz, y también en primer lugar el amor en grande, desde un infinito sentido de familia y comunidad».
«45/19 la patria, 45/19 la unidad, 45/19 la solidaridad, 45/19 la alegría, la felicidad, 45/19 la patria, la Revolución, y ahí vamos, hacia ese 45/19 con más y más realizaciones al servicio de nuestro pueblo, porque son triunfos, del pueblo, del trabajo, abnegado de cada día y todo eso se devuelve al pueblo, porque el que hace el bien, recibe bien por derecho propio».
«Por eso decimos, más hospitales, más centros de salud, más y más escuelas, universidades, más y más, tecnología para la producción, más y más, carreteras, calles, puentes, qué maravillosos puentes, quién los iba a ver, decíamos, cuándo, pero los vimos, porque cuando hay paz y hay unidad todo es posible, y porque todo es posible con el poder del amor, no del odio, el odio destruye, el odio es infame».
«Más infame todavía, cuando ese odio salía de las bocas y lenguas que se decían representar a Cristo Jesús, qué atrevimiento, eso es más maldad todavía; más calles, más viviendas, más unidades productivas, más trabajo, más comercio, más producción, todo es posible con el poder del amor y así es como vamos adelante, alabando y dándole gracias a Dios todos los días, porque es en su nombre y para su gloria que caminamos, la gloria de Dios es el pueblo tranquilo, seguro y consciente de que es posible ir adelante. Siempre más allá en unidad, hermandad, solidaridad y alegría», finalizó.